España es uno de los referentes turísticos mundiales y eso es gracias a nuestro patrimonio natural, cultural y artístico, a nuestra gastronomía y a los magníficos parajes de campo y playa en los que el turista puede disfrutar del sol y el buen tiempo. Pero todo eso quedaría deslucido si no se acompañara por una excepcional oferta hotelera.
Afortunadamente, en España disfrutamos de un excelente parque de establecimientos turísticos de todo tipo. Desde la sencilla pensión hasta el hotel más grande y lujoso, hay un amplio abanico de posibilidades para todos los bolsillos. El turista siempre encuentra su sitio. Además, esta es una apuesta con miras de futuro. Para que España siga siendo competitiva en turismo, debemos seguir reforzando la ya envidiable calidad de nuestro sector para ofrecer lo mejor de nosotros mismos al visitante. Apostar por la calidad y la seguridad es un valor en sí mismo.
¿Cómo regular la oferta turística?
El turismo crece y con él la oferta de establecimientos para descansar y pasar la noche. Aparecen nuevos formatos de alojamiento y aumenta el número de lugares disponibles. Pero eso no significa que cualquiera con una cama pueda ejercer de empresario turístico en España. Para poder alquilar habitaciones, antes tendrás que conseguir tu licencia turística e inscribir tu establecimiento en el Registro de Turismo de tu comunidad autónoma. Y para hacerlo, tendrás que pasar por una serie de controles que puedan justificar la calidad de tus servicios.
Si quieres iniciar una actividad como empresario turístico con un hotel, apartamento turístico o una vivienda vacacional, necesitarás superar ciertos trámites administrativos que te permitan publicitarte y alquilar tus habitaciones. Sin los permisos o licencias preceptivos la actividad turística es una actividad ilegal. Por lo tanto, ejerciéndola te arriesgarías a una sanción, además de quedar especialmente desprotegido en caso de problemas con tus huéspedes. Y para ellos también es arriesgado, ya que no tienen la seguridad de alojarse en un lugar con todas las garantías de habitabilidad y salubridad.
Establecimientos que requieren la licencia turística
En cuanto a los tipos de licencia turística, los primeros establecimientos que se nos vienen a la cabeza que necesiten una licencia turística son los establecimientos hoteleros. Los hoteles, obviamente, deben tener todos los permisos y licencias de actividad en regla para poder acoger a huéspedes.
Sin embargo, los establecimientos turísticos más abundantes en España son, con diferencia, los llamados alojamientos extrahoteleros, formados por apartamentos y viviendas. La diferencia entre vivienda y apartamento turístico es en ocasiones difusa, y no todas las comunidades autónomas comparten la misma definición.
En cualquier caso, podemos decir que el apartamento turístico es un establecimiento formado por una serie de unidades (llámense pisos, apartamentos, chalés, bungalós, villas o cualquier otro inmueble análogo) convenientemente amuebladas y con las instalaciones y servicios precisos para la ocupación inmediata en carácter de alquiler. Entre las instalaciones que tienen están las de conservación y preparación de alimentos (es decir, una cocina y electrodomésticos), un elemento que los diferencia de los hoteles.
Por su parte, la vivienda turística es aquel domicilio que es cedido a terceros por su propietario, sea de manera directa o indirecta, para una estancia de temporada (días, semanas o meses). Pueden darse casos de alquiler de habitaciones, no de viviendas completas. Deben tener unos servicios e instalaciones mínimos y poseen cédula de habitabilidad.