Estudio geológico

¿Cuándo solicitar un estudio geológico?

Dependerá, en su caso, del tipo de estudio geológico en el que estés interesado. Lo más habitual es que la solicitud sea previa a la redacción del proyecto. En ese caso el estudio de la geológica del terreno deberá realizarse antes de poner a trabajar las máquinas sobre el mismo. En otros casos, como los estudios hidrogeológicos y los estudios de carácter geotécnico, podrás encargarlos, además de previamente a la redacción del proyecto, incluso durante la ejecución del mismo.

Evidentemente la respuesta a esta pregunta es complicada, ya que hablamos de unos estudios que, bajo un mismo nombre, agrupan posibilidades muy diferentes y dificultades muy variadas. Así, como imaginarás, no es lo mismo un estudio de riesgo geológico de carácter minero que para levantar puentes o realizar sondeos marinos. Como normas generales podemos decir que los estudios geológicos pueden tardar desde una semana hasta unos tres meses, aunque todo ello es orientativo.

Puede parecer que el estudio geológico es algo que solamente necesitan las administraciones públicas o las grandes corporaciones empresariales para emprender actividades que exigen enormes desembolsos económicos, como hacer una carretera, levantar un puente o abrir una mina. Pero como particular también puedes necesitar en un momento dado un estudio geológico para, por ejemplo, realizar la obra de una piscina privada o realizar un sondeo para un pozo. Aunque potestativo, el estudio geológico será de utilidad en estos casos.

Es muy habitual que el estudio geológico se realice a la vez que el estudio geotécnico y que las conclusiones de ambos se presenten en un mismo documento. Lo anterior tiene lógica, ya que hablamos de dos elementos estrechamente vinculados entre sí, y cuyas conclusiones aparecerán forzosamente entrelazadas. Ambos estudios tendrán una enorme importancia en cada una de las fases de los proyectos, ya que reducirán la incertidumbre que siempre aparece en cualquier tipo de proyecto de carácter constructivo. Hablamos, pues, de las bases de un buen proyecto, aquellas que te evitarán problemas posteriores durante el momento de ejecución de esos proyectos.

A la hora de establecer un listado de las actividades para las que necesitarás un estudio geológico la lista es tan larga como la de las obras que se te puedan ocurrir de una cierta importancia. Evidentemente estos estudios serán obligatorios para cualquier tipo de actuación en una zona de riesgo geológico, pero también pueden ser perentorias como parte de un estudio geotécnico de cara a la construcción de viviendas; en el momento previo de la construcción de una granja o vivero; la construcción de instalaciones industriales; o en la elección de un terreno destinado a un uso como vertedero.

Obviamente, el estudio geológico será también necesario para la apertura de cualquier actividad en el sector minero, o para la explotación de fondos marinos en la búsqueda de, por ejemplo, hidrocarburos. Otro sector en el que el estudio geológico será necesario es el de la obra civil, donde habrá que atender a las conclusiones de este estudio de cara a la elección del punto en el cual se erigirán, por ejemplo, puentes o carreteras, especialmente si estas incluyen trayectos de montaña.

No te podemos dar una respuesta concreta a esta pregunta, ya que el precio a pagar por el estudio geológico dependerá de muchos factores, como la necesidad de maquinaria para llevarlo a cabo, el tiempo requerido en su elaboración, la dificultad de acceso al punto donde debe realizarse, entre otros. Por ello establecer una cifra aproximada sería forzosamente equivocado, ya que el arco en el que nos movemos es demasiado grande como para establecer un punto de inicio y otro de final.

Evidentemente el estudio geológico es uno de esos trámites que no podrás llevar a cabo en solitario. En otras palabras, para realizar un estudio geológico necesitas una sólida formación de carácter universitario que aporte todas las garantías al proyecto. Para conseguir tu estudio geológico tendrás que ponerte en contacto con un técnico especializado en las ramas de la geología, la ingeniería de caminos, la ingeniería de puentes y cualesquiera otros técnicos con sólida formación geotécnica u geológica.

Además, en el caso de que este estudio sea requisito previo para la autorización administrativa antes de llevar a cabo una determinada obra, es lógico pensar que el mismo tiene que estar firmado por un profesional de alguna de esas ramas, debidamente acreditado y colegiado en su Colegio Profesional correspondiente. Solo de esa forma se podrá dar veracidad a lo recogido dentro de tal estudio geológico.

En el caso de que el estudio tenga carácter geológico-geotécnico, la empresa que lo realice tiene que estar acreditada por el organismo correspondiente de la Comunidad Autónoma dentro de la cual se estén llevando a cabo las actividades objeto del estudio geológico. Es una forma de garantizar y asegurar ante la administración pública la veracidad y carácter técnico de tal  estudio.

¿Cómo conseguir un estudio geológico?

Para conseguir un estudio geológico deberás ponerte en contacto con alguna empresa que lleve a cabo ese tipo de estudios. En algunos casos, como por ejemplo si quieres realizar algunos sondeos, tendrás que solicitar permiso a alguna administración (en este ejemplo sería la Confederación Hidrográfica correspondiente) para la realización de ese estudio.

El estudio geológico será de naturaleza diferente dependiendo de la fase de redacción del proyecto en la que se realicen, puesto que tendrá que responder a las necesidades de cada una de ellas. Si hablamos de un estudio geológico realizado en la fase previa o informativa, este deberá aportar la información necesaria para la evaluación económica de la obra, así como sobre su misma viabilidad y la proposición de alternativas posibles, en su caso,

Así, habrá que aportar información geológica de la zona (morfológica, estratigráfica, litológica, tectónica, hidrológica, de drenaje), cortes geológicos, mapas y una memoria general que incluya tanto la descripción como la localización y características de todos los grupos geológicos presentes en el terreno.

Aquí el estudio geológico se centrará más en zonas con problemas, estudiando terrenos peligrosos debido a su carácter blando, erosionable, soluble, inestable y otros. También podrás realizar estudios sobre el terreno de obras importantes, como terraplenes, grandes desmontes, túneles o actividades mineras. Toda esta información se recogerá en una memoria que incluya de forma precisa las particularidades del terreno desde el punto de vista geológico e hidrológico.

Además, se deben particularizar las zonas singulares, en las que habrán de señalarse las precauciones que se tienen que tomar durante la ejecución de la obra. En esta fase las escalas aún son de carácter intermedio, bastando la utilización de planos y mapas con escalas de entre 1/50000 hasta 1/10000, dependiendo del hecho que se pretenda plasmar en los mismos y su propia naturaleza e importancia dentro del plan general de la obra.

En este momento la información del estudio geológico tiene que tener el suficiente detalle como para permitir la completa información de dicho proyecto, centrando y especificando todo lo dicho en los estudios anteriores. Toda esa información debe recogerse en una memoria, así como en planos, mapas y corte de detalle.

Asimismo, habrá que completar el conjunto con la información geotécnica, la relación de estudios especiales que tendrás que realizar durante la ejecución de la obra, la planificación en el control de calidad, la planificación en higiene y seguridad del personal, así como un plan de medidas de protección y correctoras con el medio ambiente. Como elemento curioso, en esta fase las escalas de los mapas y la planimetría se hace extremadamente detallada, llegando a usarse escalas de 1/1000 o 1/2000.

Normativa y requisitos del estudio geológico

No existe en la actualidad una normativa específica que defina el contenido estándar de un estudio geológico. Ello es debido, fundamentalmente, a la enorme variedad que existe en este campo, por lo que dicho contenido vendrá prefijado en gran medida por el objeto de ese estudio geológico que necesites.

Eso sí, podemos señalar alguna normativa “cercana” que debemos tener en cuenta a la hora de realizar este tipo de documentos, y que se extiende, en pocas palabras, por la normativa administrativa general (fundamentalmente la Ley 30 del año 1992), y las específicas a aquellas actividades que puedan necesitar de tal estudio geológico, como la Ley de Minas, la Ley de hidrocarburos, la Ley de Expropiación Forzosa, o la Ley de Montes.

Nuevamente tenemos que hablar aquí de la enorme variedad que el mundo del estudio geológico tiene, y que hace que cada uno de ellos tenga unas características y requisitos diferentes de los demás. No obstante, y como elemento más o menos genérico, podemos señalar algunas informaciones que, de forma ineludible, tienen que aparecer en este tipo de documentos.

Así, el estudio geológico tiene que señalar el objeto y las características de la actividad para la cual has solicitado tal estudio; la situación geográfica de dicha actividad, con concreción de sus linderos, cabida, naturaleza de la explotación y cuanta información de ese tipo se considere de relevancia; los mapas geológicos de la zona, explicitando uno específico del lugar donde se va a realizar la actividad; el estudio de tectónica y deslizamientos sobre la zona; los análisis de taludes; los anexos en los que se especifiquen las muestras y cálculos a partir de los cuales se han venido realizando las afirmaciones dentro del estudio geológico; y, por último, el análisis de esos resultados y las conclusiones finales, habitualmente en un articulado muy breve y de fácil comprensión.

Aun sabiendo que dentro del estudio geológico la casuística es enorme, sí podemos señalar los elementos básicos en los que se esquematiza uno de estos estudios.

El primero de ellos será la introducción, en la que se deben explicitar el alcance de tal estudio y a qué tipo de obra está dirigido. A continuación tendrás que establecer la descripción del proyecto, donde se indicarán aspectos como los materiales constructivos, el orden de magnitud de las cargas a considerar, las características arquitectónicas o excavatorias de la obra y otros aspectos similares.

Después tendrás que argumentar los objetivos, tanto el general del informe como los específicos que permitirán alcanzar ese general, y la metodología utilizada para la elaboración del mismo. A continuación habrá que especificar cuáles han sido los ensayos de campo, con el número de sondeos realizados, la profundidad de los mismos, las muestras obtenidas, y cualesquiera que sean de interés en este campo.

Igual haremos con los ensayos de laboratorio, donde tendremos que especificar de qué forma se han procesado las muestras obtenidas y qué parámetro han arrojado. La presencia de nivel freático, aguas subterráneas y los aspectos sísmicos también serán analizados. Por último, habrán de establecerse las conclusiones y, en su caso, las recomendaciones relacionadas con el tipo de proyecto a llevar a cabo y sus posibilidades en base al estudio geológico.

Cuanto cuesta estudio geológico