Cuando visito una vivienda para comprobar si cumple la normativa de habitabilidad, muchas veces escucho la misma frase:
“Aquí siempre ha vivido gente, la vivienda es habitable.”
Sin embargo, que una vivienda esté habitada no significa que cumpla la normativa ni que disponga de una cédula de habitabilidad en vigor. Este documento es el que acredita oficialmente que un inmueble reúne las condiciones mínimas para ser habitado según la legislación vigente, algo que no siempre sucede aunque en apariencia el piso, la casa o el loft se encuentren en buen estado.
Si estás viviendo en un loft sin cédula de habitabilidad, o te planteas alquilar o comprar uno en esa situación, es importante que conozcas los riesgos, las posibles sanciones y cómo regularizarlo.
¿Qué es la cédula de habitabilidad y para qué sirve?
La cédula de habitabilidad es un documento obligatorio en muchas comunidades autónomas que certifica que una vivienda cumple los requisitos legales de habitabilidad en el momento de su emisión. Este control garantiza que los inmuebles ofrecen unas condiciones mínimas de seguridad, salubridad y funcionalidad.
Gracias a la cédula de habitabilidad, la administración puede llevar un control sobre el parque inmobiliario y asegurar que las viviendas se ajustan a unos estándares mínimos. Este documento tiene una fecha de caducidad, por lo que es importante saber cuándo hay que renovarlo para evitar problemas legales o administrativos en el futuro.
Si aún no la tienes o tu cédula está caducada, puedes tramitarla a través de certicalia, donde un técnico te ayudará a regularizar la situación de tu vivienda y evitar problemas por vivir sin cédula de habitabilidad.
¿Es obligatorio tener cédula de habitabilidad para alquilar o vender?
Depende de la comunidad autónoma y de la operación que se realice. Por ejemplo:
- En Cataluña es obligatoria para cualquier operación de compraventa o alquiler. También se solicita para dar de alta suministros como agua, luz o gas, e incluso para cambios de titularidad de los mismos.
- En la Comunidad de Madrid, el documento equivalente es la licencia de primera ocupación, con requisitos muy similares.
En la práctica, si no dispones de cédula de habitabilidad, no podrás contratar suministros básicos, empadronarte, inscribir a menores en centros educativos o realizar otros trámites esenciales. Aunque en algunos casos no se impongan multas directas, la imposibilidad de alquilar legalmente, las limitaciones administrativas y los posibles procedimientos sancionadores suponen un gran inconveniente para el propietario.
Vivir o alquilar un loft sin cédula de habitabilidad significa asumir todos estos riesgos.
¿Qué ocurre si hago reformas después de obtener la cédula?
Tener una cédula de habitabilidad vigente no garantiza que siempre cumplas la normativa. Reformas posteriores pueden alterar las condiciones mínimas exigidas por los decretos de habitabilidad (en Cataluña, por ejemplo, el Decreto 141/2012), como:
- Tapar ventilaciones en baños o cocinas.
- Reducir dimensiones mínimas de estancias al dividir espacios.
- Realizar reformas que incumplen normativas municipales.
- Deterioros estructurales que afecten a la seguridad.
Si se detectan estas modificaciones, el inmueble podría perder la condición de habitable, y sería necesario realizar una “contrarreforma” para recuperar la validez de la cédula. Por eso, es fundamental consultar siempre con un técnico antes de realizar cualquier obra que pueda alterar la distribución o la ventilación de la vivienda.

¿Puedo alquilar un local como vivienda?
No. Un local comercial no puede alquilarse legalmente como vivienda. Si se detecta un uso fraudulento (por ejemplo, vivir en un loft que en realidad sigue siendo un local), el propietario puede enfrentarse a sanciones, salvo que pueda demostrar que no tenía conocimiento del uso indebido.
Si deseas vivir en un local o alquilarlo como loft, es necesario tramitar un cambio de uso de local a vivienda. Este proceso requiere:
- Solicitar licencia de cambio de uso en el ayuntamiento.
- Adaptar el espacio a la normativa municipal de habitabilidad.
- Obtener la nueva cédula de habitabilidad.
Incumplir este procedimiento puede suponer multas importantes, la imposibilidad de registrar el inmueble como vivienda y problemas para contratar suministros o empadronarse.
Claves para evitar problemas
- Que una vivienda esté ocupada no significa que sea habitable legalmente.
- Antes de vender, alquilar o vivir de forma estable en un loft, tramita la cédula de habitabilidad con un técnico competente.
- Si tu vivienda no cumple los requisitos, realiza las obras necesarias para obtenerla.
- Para convertir un local en vivienda, sigue el procedimiento legal de cambio de uso.
Si necesitas tramitar o renovar tu cédula de habitabilidad, en certicalia te ponemos en contacto con técnicos verificados que pueden gestionar el proceso en tu ciudad, asegurando que tu vivienda cumpla todos los requisitos legales y evitando los riesgos de vivir en un loft sin cédula de habitabilidad.
Si prefieres atención telefónica, puedes informarte llamando al 900 838 532.