Con el fin de informar sobre cómo conseguir una mayor eficiencia energética, el técnico certificador deberá introducir una serie de medidas de mejora y valorar su impacto sobre la calificación energética base del edificio. Para que el informe final de certificación energética, emitido por el programa, se considere completo, deberá incorporarse en él al menos un conjunto de medidas de mejora de eficiencia energética de aplicación al edificio.
A continuación te contamos las mejores medidas de ahorro energético que pueden aparecer en el certificado energético. Si todavía no tienes tu certificado o quieres mejorarlo, en certicalia podemos ponerte en contacto con un técnico certificador de tu zona.
Estas medidas deberán afectar tanto a la envolvente térmica del edificio como a las instalaciones de ACS, calefacción, refrigeración y, en caso de tratarse de un uso terciario, a la instalación de iluminación.
El técnico puede definir varias medidas de mejora y combinarlas, creando paquetes de medida. La aplicación informática calculará la reducción del consumo energético y de las emisiones de CO₂ en caso de implementarlas y las comparará con los resultados del edificio de origen.
A continuación, explicamos una serie de recomendaciones de mejora habituales en los certificados energéticos. Hay que recordar que cada inmueble es diferente y que el técnico estudia y establece aquellas medidas que son técnicamente viables. Es decir, puede haber mejoras que sean muy buenas y mejoren la calificación, pero cuya ejecución resulte muy costosa tanto técnica como económicamente.
Medidas en la envolvente térmica
Son aquellas que pretenden reducir las pérdidas y ganancias de energía de la vivienda. Es decir, disminuir el flujo de calor desde el exterior al interior en verano y, en invierno, evitar pérdidas de calor desde el interior al exterior. Con esto se consigue disminuir la demanda energética, reduciendo así los consumos de calefacción y refrigeración del inmueble.
Mejoras en el aislamiento térmico
El IDAE propone la adición de aislante térmico en fachadas, suelo, cubierta y puentes térmicos.
Con respecto a la fachada, propone la adición por el interior, rellenando cámaras de aire, o por el exterior. Es posible que la mejor opción sea la adición por el exterior, ya que no interfiere demasiado con los usuarios del edificio, mejora notablemente el aislamiento térmico, corrige puentes térmicos y no reduce la superficie útil de la vivienda. Pero también será la solución menos económica.
El aislamiento interior es más económico, aunque tiene el problema de que puede crear nuevos puentes térmicos con riesgos de condensaciones.
Mejoras en zonas de puentes térmicos
Un puente térmico es una zona de la envolvente del edificio en la que las pérdidas de calor son superiores al resto de zonas por las diferencias de conductividades térmicas de los diferentes materiales. Serán zonas donde el cerramiento pierde su inercia térmica, sobre todo en las cajas de persianas, encuentros con forjados y encuentros con pilares.
Sustitución o mejora de huecos
Nos referimos tanto a vidrios como a la carpintería. Es muy importante reducir la carga de radiación solar que entra por los vidrios al interior de los edificios. Además, dependiendo del clima de la zona, será bueno aumentar la estanqueidad y reducir la permeabilidad de los marcos, consiguiendo así un mejor comportamiento térmico.
Para reducir la carga térmica de vidrios, el IDAE aconseja sistemas de doble acristalamiento con cámara de aire, vidrios con sistemas de control solar o de baja emisividad, o la incorporación de doble ventana.
Una medida asequible económicamente y no muy difícil de implantar es la colocación de elementos de protección solar como lamas o toldos, que disminuirán la carga térmica.
Medidas en las instalaciones
Mejorar la eficiencia de sistemas de refrigeración, calefacción, ACS e iluminación
Consiste principalmente en la sustitución de los equipos antiguos de baja eficiencia por nuevos sistemas de alto rendimiento. Por ejemplo:
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Sustitución de sistemas de aire acondicionado por otros equipos de mayor rendimiento.
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Sustitución de equipos de generación de frío tipo split, muy comunes en la mayor parte de los hogares, por bombas de calor de alta eficiencia. Su rendimiento medio estacional es cercano al 400%, disminuyendo así las emisiones por refrigeración.
Sustitución del equipo generador de calor para calefacción y ACS
Se propone la sustitución por caldera de combustión de alta eficiencia, si fuese posible su instalación. En caso de que ya exista una caldera de combustión, se puede aumentar su rendimiento medio estacional.
Como medida más eficiente se propone la instalación de una caldera de biomasa, siempre que sea posible su instalación, ya que requiere amplios espacios para el almacenamiento del combustible biomásico. Estos cambios afectarían al rendimiento medio estacional del sistema, mejorando las emisiones de calefacción y ACS.
Mejora de la eficiencia de la instalación de iluminación
En usos terciarios se recomienda sustituir las lámparas antiguas por otras de alta eficiencia energética y bajo consumo. Es importante la instalación de sistemas de control como temporizadores o sectorización de espacios.
Incorporación de recuperación de calor
En edificios terciarios con sistemas de aire primarios es aconsejable la instalación de un sistema de recuperación de calor. Este sistema recupera casi el 70% de la energía suministrada al sistema de climatización, disminuyendo las emisiones de calefacción y/o refrigeración.
Incorporación de sistemas de energías renovables
Como con todas las medidas, habrá que estudiar primero si son económica y técnicamente viables, es decir, si es posible su instalación en el inmueble a calificar y si su inversión es aconsejable para el cliente.
Estas instalaciones podrán ser de energía solar térmica para producción de ACS, calefacción o refrigeración, y de energía solar fotovoltaica para producción de electricidad.
Otras medidas de mejora
Este apartado pretende aconsejar sobre algunas buenas prácticas que el usuario podría adoptar. Incidirían en el consumo y el comportamiento energético del edificio.
1. Mejoras que afectan a las instalaciones de energía
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Colocación de termostatos en viviendas, en zonas que no sean demasiado calientes ni frías. Es importante tener en cuenta cuáles serán las temperaturas de confort tanto en invierno (20-21 ºC) como en verano (23-25 ºC) y saber que, por cada grado que se aumente o disminuya, el consumo será de un 8-10% mayor.
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Instalación de sistemas de regulación y control en el sistema de calefacción y refrigeración.
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Instalación de sistemas de control y regulación en la instalación de iluminación: interruptores automáticos, sensores de presencia, limitadores de intensidad, sectorización de zonas, etc., que aprovechen la energía adaptándola a las necesidades.
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Incorporación de contadores individuales en sistemas de calefacción central.
2. Medidas que afectan al comportamiento del edificio
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Aprovechamiento de la iluminación natural.
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Ventilación controlada en invierno para reducir la demanda de calefacción.
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Ventilación nocturna en verano o cuando las temperaturas sean más frescas, para reducir la demanda de refrigeración.
Si quieres mejorar la calificación de tu vivienda o necesitas obtener el certificado energético para vender o alquilar, puedes solicitar presupuesto en certicalia o llamar al 900 838 532 y un técnico certificador te ayudará con las medidas de mejora más adecuadas para tu caso.
Si eres arquitecto, arquitecto técnico, ingeniero o ingeniero técnico titulado y quieres recibir proyectos de certificación energética de inmuebles, date de alta en certicalia. Recibirás los encargos de nuestros clientes dentro de tu ámbito de actuación.