En la práctica, licencia de actividad, licencia de apertura, licencia de funcionamiento o licencia de ocupación y funcionamiento de actividades son términos que, según la normativa de cada Ayuntamiento, se utilizan para un mismo objetivo: autorizar el desarrollo de una actividad en un inmueble (local, oficina, nave, vivienda, etc.).
En algunos municipios, expresiones como licencia de ocupación o licencia de segunda ocupación se reservan para el permiso necesario tras realizar obras importantes o un cambio de uso en el local.
En todos los casos, la finalidad es la misma: que el Ayuntamiento compruebe que el local cumple con las condiciones exigidas para abrir al público con seguridad, sin generar riesgos para clientes, trabajadores, vecinos ni para el medio ambiente.
La Licencia de Actividad es un permiso esencial para iniciar operaciones comerciales. Este documento acredita que tu negocio cumple con la normativa vigente, aportando seguridad y legalidad. Solicítala para evitar sanciones.
¿Qué debe cumplir el local para obtener la licencia de actividad?
Cualquier actividad desarrollada en un inmueble (local, piso, nave industrial, etc.) debe ajustarse a una serie de normas generales y específicas. De forma resumida, el local debe cumplir, como mínimo, con los siguientes requisitos:
- Que el uso del inmueble y sus condiciones sean compatibles con las ordenanzas urbanísticas vigentes en esa ubicación.
- Que existan medidas de seguridad contra incendios suficientes y correctamente dimensionadas.
- Que las condiciones de iluminación, ventilación y salubridad cumplan los reglamentos aplicables.
- Que las instalaciones (eléctricas, ascensores, climatización, gas, etc.) estén ejecutadas y legalizadas conforme a normativa.
- Que se respeten las normas de seguridad y salud laboral para los trabajadores.
- Que se cumplan las normas de protección ambiental (ruidos, vibraciones, vertidos, evacuación de aguas, emisiones, productos tóxicos, etc.).
- Que el establecimiento sea accesible para personas con discapacidad, dentro de los requisitos que marque la normativa.
El nivel de exigencia de estos requisitos varía según:
- La actividad concreta a desarrollar.
- La superficie y configuración del local.
- Su ubicación y su antigüedad.
¿Quién garantiza que el local cumple la normativa?
Para solicitar la licencia de actividad es necesario que previamente un técnico competente (ingeniero, ingeniero técnico, arquitecto o arquitecto técnico), elegido libremente por ti, certifique que el local y sus instalaciones cumplen toda la normativa aplicable. Esto se hace mediante el proyecto de actividad.
En ese proyecto, el técnico debe:
- Describir la actividad o actividades que se desarrollarán en el local.
- Detallar las instalaciones (contra incendios, eléctricas, sanitarias, climatización, etc.) y la maquinaria a utilizar.
- Recopilar toda la normativa aplicable y justificar su cumplimiento.
- Incorporar planos y anejos técnicos que definan el estado actual del local y las soluciones propuestas.
Cuando el local necesita obras para adaptarse a la actividad (por ejemplo, redistribución interior, nuevos aseos, salidas de emergencia, instalaciones contra incendios, etc.), el proyecto de actividad definirá y valorará esas obras de adecuación, justificando que cumplen las normas.
Si no son necesarias obras porque el local ya reúne las condiciones para la actividad, el proyecto de actividad justificará que las instalaciones existentes cumplen la normativa y que no hace falta adaptarlas.
¿Es obligatorio contratar un técnico para la licencia de actividad?
Sí. No solo es obligatorio porque solo un técnico puede firmar el proyecto de actividad, sino que lo recomendable es contar con ese técnico incluso antes de alquilar o comprar el local.
Algunos ejemplos habituales:
- Un cliente quiere montar un bar en un local donde las normas urbanísticas no permiten ese uso.
- Se elige un local con un alquiler muy barato, pero las obras de adaptación resultan carísimas por no reunir condiciones mínimas (anchura de accesos, altura libre, ventilación, aseos, etc.).
- Se compra una nave industrial económica que, después, resulta estar fuera de ordenación, con un expediente de demolición o en una zona donde está prohibido implantar la actividad deseada.
Contar con un buen asesoramiento técnico desde el principio no es un gasto, sino una inversión que puede evitar errores costosos y problemas futuros.
La Licencia de Actividad es un permiso esencial para iniciar operaciones comerciales. Este documento acredita que tu negocio cumple con la normativa vigente, aportando seguridad y legalidad. Solicítala para evitar sanciones.
Declaración responsable y licencia de actividad: ¿cómo encajan?
Las directivas europeas de simplificación administrativa obligaron a España a reducir la burocracia para la creación de empresas y la implantación de actividades. Como resultado, muchas actividades se pueden iniciar hoy sin esperar a la concesión expresa de la licencia, mediante la figura de la declaración responsable de actividad o la comunicación previa, especialmente en establecimientos comerciales de menos de 300 m².
La diferencia principal es:
- Actividades sometidas a licencia previa: No se puede iniciar la actividad hasta obtener el permiso expreso del Ayuntamiento.
- Actividades sometidas a declaración responsable o comunicación previa: La actividad puede abrir desde el mismo día en que se presenta la declaración responsable y la documentación en el Ayuntamiento, siempre que se cumplan los requisitos.
Es importante tener claro que, aunque la actividad se inicie mediante declaración responsable, sigue siendo imprescindible:
- Contar con un proyecto de actividad.
- Que ese proyecto esté firmado por un técnico competente.
- Que el local y las instalaciones realmente cumplan la normativa.
Abrir un comercio sin proyecto de actividad, sin técnico y sin cumplir las normas puede acarrear:
- Multas y órdenes de cese de actividad.
- Problemas con el seguro, que puede negarse a asumir indemnizaciones en caso de accidente.
- Incluso responsabilidad penal, si se produce un siniestro con víctimas y el local no reunía las condiciones de seguridad exigibles.
¿Qué es la licencia de actividad?
Resumiendo, la licencia de actividad es el permiso municipal que autoriza el uso de un inmueble (local, oficina, nave, vivienda, etc.) para desarrollar una determinada actividad. Quedan exentas, en general, las actividades profesionales, artesanales o artísticas realizadas en la vivienda privada sin venta directa al público y que sean inocuas.
Los requisitos concretos dependen de:
- El tipo de actividad (inocua o clasificada según el Ayuntamiento).
- La superficie del local.
- La potencia de los equipos.
- El impacto ambiental o acústico, entre otros factores.
En actividades no inocuas (como pequeños comercios de productos no perecederos, tiendas de moda u oficinas), los trámites suelen ser más sencillos que en actividades clasificadas (hostelería, ocio nocturno, talleres, industrias, etc.).
El documento principal para obtener la licencia de actividad es el proyecto de actividad y, en su caso, de obras, donde se analiza si el inmueble está preparado para el desarrollo de la actividad o qué obras de adaptación son necesarias para ajustarse a la normativa.
¿Qué es la licencia de apertura?
La licencia de apertura es, en esencia, el documento final que acredita que el local cumple todos los requisitos para iniciar la actividad. Tras solicitar la licencia de actividad y realizar las obras e instalaciones necesarias:
- Se presenta la documentación requerida (proyecto, certificados, boletines, etc.).
- El Ayuntamiento puede realizar una inspección del local.
- Si todo es correcto, el Organismo Municipal expide la licencia de apertura o de funcionamiento.
En muchos establecimientos comerciales de menos de 300 m², la normativa actual permite sustituir esa licencia previa por una declaración responsable o comunicación, de forma que el negocio puede abrir sin esperar una resolución expresa, siempre que el local cumpla la normativa y se presente toda la documentación técnica.
Trámites y autorizaciones adicionales según el tipo de actividad
Además de la licencia de actividad o la declaración responsable, ciertas actividades necesitan autorizaciones complementarias o trámites ambientales específicos, ya sea antes o a la vez que se tramita la licencia. Algunos ejemplos:
- Actividades situadas en la zona de policía de cauces públicos (100 metros a cada lado):
- Pueden requerir autorización de obras en zona de policía por parte del Organismo de Cuenca, con justificación técnica de que no se afecta al cauce.
- Actividades en la zona de influencia de carreteras públicas:
- Pueden estar sometidas a un régimen de autorización previa del organismo titular de la vía.
- Actividades ubicadas en espacios naturales protegidos o zonas de la Red Natura 2000:
- Pueden precisar informes o autorizaciones ambientales adicionales.
- Determinadas instalaciones industriales:
- Pueden requerir Autorización Ambiental Unificada, Autorización Ambiental Integrada, Calificación Ambiental u otros procedimientos de control.
- Actividades relacionadas con producción o manipulación de alimentos:
- Deben tramitar el registro sanitario correspondiente.
- Establecimientos turísticos:
- Suelen necesitar autorización o inscripción en los registros turísticos autonómicos.
- Actividades en suelo no urbanizable:
- Exigen previamente un proyecto de actuación urbanística y su aprobación.
A todo ello hay que sumar los trámites mercantiles, fiscales y de Seguridad Social que debe cumplir cualquier persona o empresa que inicie una actividad económica, aunque estos ya son objeto de otro análisis específico.
Resumen: ¿hay diferencia entre licencia de actividad y licencia de apertura?
En la práctica, la terminología puede cambiar según el municipio, pero podemos resumir así:
- Licencia de actividad
- Autoriza el uso del inmueble para una actividad determinada.
- Se basa en un proyecto técnico que justifica el cumplimiento de la normativa.
- En muchos casos se tramita como licencia previa o se sustituye por declaración responsable.
- Licencia de apertura (o de funcionamiento)
- Es el acto final por el que el Ayuntamiento confirma que el local está correctamente ejecutado y puede abrir al público.
- En comercios de menos de 300 m², suele sustituirse por una declaración responsable o comunicación previa, siempre que se cumplan las condiciones.
¿Cómo puede ayudarte certicalia?
Si estás pensando en abrir un negocio y necesitas licencia de actividad, licencia de apertura o tramitar tu declaración responsable, en certicalia puedes encontrar técnicos especializados que te asesoren desde la elección del local hasta la obtención de todos los permisos necesarios.
Un profesional de certicalia puede:
- Revisar si el local es apto urbanísticamente para tu actividad.
- Redactar el proyecto de actividad y de obras.
- Orientarte sobre los trámites adicionales (ambientales, sanitarios, turísticos, etc.).
- Ayudarte a cumplir la normativa para abrir con seguridad y tranquilidad jurídica.