El concepto de declaración de obra nueva podría definirse como una manifestación realizada en escritura pública donde el propietario de una finca constata que en ella se ha construido o se está construyendo una edificación.
Tipos
Existen tres tipos de declaración de obra nueva:
- Terminada (de un edificio que se acaba de construir).
- Antigua (de un edificio construido hace varios años y que no está inscrito registralmente).
- En construcción (edificación sin terminar).
La declaración de obra nueva es una escritura que indica que sobre un solar o una parcela se acaba de construir un edificio. La formalización de esta escritura obliga a cumplir una serie de requisitos para poder llevarse a cabo.
Lo más importante es el título de propiedad de quién vaya a realizarla. Si se trata de una persona física tendrá que presentar la escritura de propiedad de la finca. Si se trata de personas jurídicas (sociedades), además habrá que acreditar los poderes correspondientes.
Además de esto será necesario disponer de:
- Licencia de obras expedida por el Ayuntamiento del municipio.
- Certificado final de obra emitido por un técnico competente.
- El edificio deberá disponer de un seguro decenal según indica la LOE. (Ley de Ordenación de la Edificación).
- Disponer del Libro del Edificio.
- Emisión de la Cédula de habitabilidad de primera ocupación para edificios de viviendas o viviendas unifamiliares.
- Certificado de Eficiencia Energética según el RD 235/2013.
La declaración de obra nueva antigua es una escritura que se realiza para aquellas edificaciones que no son nuevas. Por tanto, no le es aplicable la normativa urbanística actual, pero no se puede proceder a su demolición por haber prescrito la ilegalidad urbanística. Esto también incluye viviendas o edificaciones construidas antes de la aprobación de los planes urbanísticos vigentes en el municipio en cuestión. Los requisitos para inscribir estas edificaciones varían según sea su año de construcción, pero a grandes rasgos, se clasifican en obras terminadas antes del año 1990 y obras terminadas después del año 1990.
Finalmente, la declaración de obra nueva en construcción constata que un propietario dispone de una edificación que está en proyecto o en vías de construcción, sin terminar o ni siquiera empezada. En este caso el notario requerirá la licencia de obras y el proyecto técnico.
¿Cuánto cuesta la declaración?
El coste de una declaración de obra nueva puede variar según la comunidad autónoma en la que se encuentra la edificación. El precio de la declaración de obra nueva dependerá también de los honorarios de la notaría en la que tramitemos, así que la mejor opción es dirigirnos allí y solicitar presupuesto. Como nota orientativa, se podría considerar que los gastos de notaría y papeles pueden suponer un 3,00% del valor de tasación del inmueble.