¿Qué son los pozos de agua?

Si tienes un terreno o una parcela y estás pensando en hacer un pozo, bien sea para abastecimiento, riego, uso industrial o darle uso de abrevadero para el ganado, tendrás que hacer los trámites necesarios para legalizarlo. Si por el contrario tu finca ya tenía un pozo, debes asegurarte de que se trata de un pozo legalizado para poder aprovechar el agua. Los proyectos de pozos de agua son un requisito imprescindible para poder usar un pozo.

Legalización de los pozos de agua

Los proyectos de pozos de agua son informes técnicos realizados por profesionales competentes. Esta documentación es necesaria para obtener la autorización administrativa que te permita iniciar los trabajos de perforación y aprovechamiento del pozo.

Aunque tengas un terreno que sea de tu propiedad no puedes, por tu cuenta, empezar una excavación para abrir un pozo y empezar a extraer aguas subterráneas independientemente del uso que le vayas a dar. Los trabajos para hacer un pozo y poder captar el agua deben de estar supervisados por un técnico competente.

La legalización de un pozo es un proceso complejo por las características de las obras y los trámites administrativos. Para que puedas hacer un uso legal de un pozo, debes contar con la autorización de la Confederación Hidrográfica o la Agencia de Agua de la comunidad autónoma correspondiente.

En realidad, la legalización de pozos consiste su inscripción en el Registro de Aguas. El Registro de Aguas está gestionado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Con este registro del pozo, se te otorga el derecho de aprovechamiento de aguas en ciertas condiciones. El registro de aguas se estructura en tres secciones: Sección A, Sección B y Sección C.

Cuando el aprovechamiento de los recursos hídricos se haga dentro de un mismo terreno, finca, parcela y proceda de manantiales o aguas subterráneas de su interior se inscribirá en la sección B, siempre que el volumen anual no supere los siete mil metros cúbicos y el uso del agua se haga en la misma finca.

La inscripción en la sección B es el caso más común para los propietarios de fincas pequeñas que quieran utilizar un pozo para regar un huerto o un jardín, para consumo doméstico o para el uso de fábricas pequeñas.

Los proyectos de pozos de agua

Los proyectos de pozos de agua son una parte del conjunto de trámites necesarios para que puedas usar legalmente el pozo de agua de tu finca. Aunque las distintas Administraciones autonómicas tienen sus propios requerimientos, en general, los proyectos técnicos de pozos de agua constan de:

-Memoria explicativa: debe incluir un estudio geológico e hidrogeológico de la zona de excavación y las características del acuífero.

-Los planos de situación y mapas hidrológicos de las zonas donde se van a ejecutar las obras de captación de agua.

-Presupuesto para llevar a cabo la obra de captación de agua.

-Informe sobre el uso y las finalidades del aprovechamiento del agua. Si fuera necesario, un informe sanitario.

-Indicación de los caudales máximos instantáneos y el volumen anual de consumo.

-Censo de población y ganadero o bien justificante de número de habitantes, si el pozo es para el abastecimiento de urbanizaciones.