Vender una vivienda es uno de los procesos más importantes y complejos a los que se enfrenta cualquier propietario. Más allá del simple intercambio económico, implica una serie de gestiones administrativas, fiscales y legales que es fundamental conocer para evitar errores, retrasos o gastos innecesarios.
En esta guía definitiva te explicamos paso a paso qué necesitas para vender tu casa: desde los certificados obligatorios, hasta los impuestos que debes pagar y los trámites que no puedes pasar por alto. Si prefieres evitar complicaciones, siempre puedes apoyarte en el servicio especializado de Certicalia para vender tu casa, diseñado para acompañarte durante todo el proceso.
Los certificados que necesitas para vender tu vivienda
Antes de poner tu vivienda en el mercado, es imprescindible que cuentes con una serie de documentos que acreditan la legalidad de la propiedad y el cumplimiento de ciertos requisitos técnicos. Uno de los más importantes es el certificado de eficiencia energética. Desde 2013, este documento es obligatorio para vender o alquilar cualquier inmueble, ya que informa al comprador del consumo energético estimado del hogar. Se presenta en una escala de colores, de la A (más eficiente) a la G (menos eficiente), y debe ser emitido por un técnico cualificado. En Certicalia puedes contratar este servicio de forma rápida, económica y totalmente online.
Otro documento que debes tener a mano es la nota simple registral, que recoge información clave sobre la vivienda como la titularidad, las cargas hipotecarias o embargos. También deberás presentar la escritura de compraventa, el contrato que demuestra que eres el propietario legal del inmueble. Además, los compradores suelen requerir los últimos recibos del IBI y suministros, para comprobar que no existen deudas pendientes.
En algunas comunidades autónomas, como Cataluña, Baleares o La Rioja, también se exige la cédula de habitabilidad, que certifica que la vivienda cumple con los requisitos mínimos de habitabilidad. Asegúrate de consultar si en tu región es necesaria antes de iniciar la venta.
Qué impuestos debes pagar al vender una casa
Al vender tu vivienda obtendrás un ingreso, pero también deberás cumplir con ciertas obligaciones fiscales. El primer impuesto que deberás afrontar es la plusvalía municipal, conocido técnicamente como el Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (IIVTNU). Este tributo se paga al ayuntamiento y se calcula en función del valor catastral del terreno y del tiempo que hayas sido propietario. Aunque algunas sentencias judiciales han matizado su aplicación, sigue siendo obligatorio en la mayoría de casos.
El segundo gran impuesto es el IRPF por ganancia patrimonial, que se declara en la renta del año siguiente a la venta. Se calcula restando al precio de venta el valor de adquisición del inmueble (incluyendo los gastos asociados como notaría, registro o reformas). La diferencia, si es positiva, tributa como ganancia. Sin embargo, existen exenciones. Por ejemplo, si reinviertes el dinero en otra vivienda habitual o si eres mayor de 65 años y vendes tu residencia principal, puedes quedar exento del pago.

Trámites imprescindibles durante la compraventa
El proceso de venta de una vivienda comienza con la valoración del inmueble. Aunque puedes hacerlo por tu cuenta consultando precios en portales inmobiliarios, contar con la opinión de un tasador o un agente inmobiliario puede ayudarte a establecer un precio de mercado más realista.
Una vez encuentras un comprador interesado, lo habitual es firmar un contrato de arras, donde ambas partes se comprometen a llevar a cabo la operación y el comprador entrega una señal, que suele oscilar entre el 5% y el 10% del precio total. Este documento establece plazos y condiciones de la venta, y actúa como garantía ante posibles incumplimientos.
El siguiente paso es la firma de la escritura pública de compraventa ante notario. Aunque legalmente puede elegir cualquiera de las partes, en la práctica suele ser el comprador quien selecciona el notario. En esta firma se formaliza la operación, se realiza el pago final y se entrega la posesión del inmueble.
Finalmente, el nuevo propietario debe inscribir la vivienda en el Registro de la Propiedad. Aunque este trámite no es obligatorio, sí es altamente recomendable para proteger legalmente sus derechos como nuevo titular.
Por qué confiar en Certicalia
Gestionar todos estos pasos por tu cuenta puede ser abrumador. Cada trámite implica tiempo, papeleo y, a menudo, dudas legales que requieren el asesoramiento de un experto. En Certicalia ofrecemos un servicio integral para propietarios que quieren vender su vivienda sin complicaciones. Nos encargamos de solicitar los certificados necesarios, resolver tus dudas legales y guiarte durante todo el proceso con precios cerrados y sin letra pequeña. Nuestra plataforma digital te permite gestionar todo desde casa, con la tranquilidad de contar con profesionales verificados.
Conclusión
Vender una casa no es simplemente encontrar un comprador y firmar un contrato. Es un proceso que implica cumplir con obligaciones legales, presentar documentación específica y gestionar correctamente los aspectos fiscales. Contar con una guía clara y profesionales especializados marca la diferencia entre una venta exitosa y una llena de imprevistos. Si estás pensando en vender tu casa, infórmate, prepárate y confía en Certicalia para hacerlo más fácil, seguro y rentable.