En España aun no estamos familiarizados con la relación entre vivienda y ahorro energético. Pero pronto nos habituaremos a pensar como afecta el consumo de nuestra vivienda tanto al medio ambiente como a nuestro bolsillo. Hoy os damos unos consejos sobre para ahorro energético en el hogar
Ya que a partir del próximo mes de enero cada inmueble que se ponga en venta o en alquiler tendrá un certificado energético que contendrá una etiqueta energética parecida a las que ya incluyen los electrodomésticos para indicar su eficiencia en cuanto al consumo de energía y la cantidad de emisiones de CO2 emitidas. Los inmuebles serán clasificados según una escala que va desde la categoría A (la más eficiente) a la categoría G (la menos eficiente).
Al tratarse de una escala que ya nos resulta familiar, en el caso de las viviendas será muy fácil saber si una en concreto es mejor o peor que otra en cuanto a su eficiencia energética, igual que sabemos que una lavadora o nevera etiquetada con una C consumirá más que las que llevan en su etiqueta una letra A.
Cuando llega el invierno aumenta el consumo de energía nuestros hogares, sobretodo por el uso de la calefacción y de las calderas para calentar agua, aunque tambien son importantes los gastos en electricidad que supone el uso de los electrodomésticos y la iluminación. Muchos de estos consumos se pueden reducir con algunos cambios en nuestros hábitos:
1. Piensa a la temperatura a la que ajustas la calefacción. Por cada grado que la aumentemos el consumo de energía se incrementa un 7% aproximadamente. En en invierno, una temperatura de entre 19ºC y 21ºC debería ser suficiente.
2. Mantén los equipos de calefacción limpios, ya que la acumulación de suciedad puede hacer que pierdan eficiencia.
3. Ábrigate también dentro de casa, no hace falta estar en manga corta en enero. Podemos bajar la calefacción por la noche si utilizamos ropa de cama abrigada.
4. Aprovecha el el sol para calentar la vivienda, dejando las cortinas abiertas para que entre durante el día.
5. Revisa el aislamiento en puertas y ventanas, asegurándote de que las fugas de aire estén bien selladas. Gran parte de la necesidad de calefacción se produce por pérdidas.
6. Si sales la casa apaga la calefacción o la déjala a una temperatura inferior. Lo ideal es dejarla programada para que se encienda poco antes de la hora en que suelen llegar las personas.
7. Si puedes sustituye tu caldera y tus electrodomésticos por equipos eficientes, seguramente, si no son nuevos compense comprar otros ya que los ahorros en energía amortizarán el precio de compra.
8. Asegúrate de que las ventanas, puertas y entradas de aire estén bien cerradas cuando tienes encendida la calefacción, en general una media hora por la mañana es suficiente para renovar el aire interior.
9. No utilices calentadores de keroseno o propano si no hay una apropiada ventilación. Pueden ser muy peligrosos dado monóxido de carbono que producen.
10. Procura mejorar el aislamiento térmico de tu hogar, sustituyendo las ventanas por otras de doble acristalimiento con rotura de puente térmico
Fuente texto: www.ahorrarenergiaencasa.com – Fuente imagen: www.ecoticias.com