¿Qué es el proyecto geotermia?

El Proyecto geotermia consiste en un proyecto o memoria técnica que se realiza respecto de las instalaciones que funcionan y aprovechan la energía geotérmica proveniente del subsuelo para proveer a viviendas plurifamiliares o vivienda unifamiliar, edificios, hoteles, polideportivos, invernaderos, hospitales, oficinas, piscinas o fábricas.

La energía geotérmica:

La energía geotérmica se nutre del calor interno de la tierra para adquirir agua caliente o como climatizador. Esta energía renovable no es muy conocida en el mundo de la energía, pero todos hemos visto fantásticas imágenes de géiseres o disfrutado de unas extraordinarias aguas termales. Pues bien, ahí radica la magia de esta nueva forma de mover el mundo.

La corteza terrestre recibe todo el calor del Sol y almacena toda esa energía en su interior lo que le convierte en una fuente de calor prácticamente inagotable y renovable. Utilizando toda esta energía calorífica, mediante perforaciones si hay mucha profundidad o mediante intercambiadores verticales u horizontales si hay menos, podremos obtener temperaturas de más de 60º que se transmitirá a la vivienda o al edificio a través de bombas de calor geotérmicas.

Ventajas de la energía geotérmica:

Que se trate de una energía que se obtiene a altas temperaturas no le resta eficiencia. Al contrario, permite producir frío o calor a partir de una sola instalación, puesto que el calor absorbido por los materiales puede ser reconducido al subsuelo gracias a las bombas de calor geotérmicas.

Al ser un sistema que está enterrado bajo tierra, se mantiene protegido de las inclemencias del tiempo o de malos usos, por lo que su durabilidad es muy alta. Su rendimiento es elevado, ayudándonos a ahorrar hasta un 75% del consumo de energía anual. Por esta razón, su amortización también está asegurada, aunque la inversión inicial para instalar estos sistemas sea costosa.

No tiene ningún impacto visual porque se instala en el subsuelo, ni es necesaria la utilización de chimeneas, ni depósitos. Es un sistema muy seguro, eliminando cualquier posibilidad de producir virus o bacterias.

No emiten ruidos, ni humor, ni olores. El coste de su mantenimiento es muy bajo y no produce emisiones de Dióxido de Carbono. Además, es compatible con el uso de otras energías renovables. Su vida útil es de 20 años como mínimo, aunque puede ser más si el mantenimiento es adecuado.

Cuando la temperatura de la fuente supera los 100º suele utilizarse para producir electricidad. Cuando no es lo suficientemente alta, se emplea como fuente térmica en procesos industriales, en el sector servicios o en viviendas unifamiliares o plurifamiliares. Las fuentes con temperaturas por debajo de los 100º se usan para calefacción y refrigeración de edificios y casas, y si aún tienen temperaturas más bajas se utilizan solo para climatizar y obtener agua caliente. Aunque parezca increíble a menos de 10 metros desde nuestros pies hacia el subsuelo ya podemos encontrar estas fuentes de energía renovable.