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Gonzalez Zamarra respondió: Profesional de Certicalia
Hola. Para convertir un local en vivienda necesitas el proyecto de un arquitecto. Es un trámite imprescindible, así que te recomiendo que no hagas nada hasta buscar un arquitecto. Él estudiará la normativa, verá el local, y redactará un proyecto de cambio de uso, en el que se justificará el cumplimiento de la normativa y se garantizará que se cumplen todos los requerimientos para el nuevo uso. Entonces el ayuntamiento, si lo encuentra todo en orden, está obligado a dar la licencia de cambio de uso y se hacen las obras después. Si encuentra algo que no está en orden, lo comunicará para que se subsane en el proyecto. Se cambia el proyecto según el requerimiento del ayuntamiento y te dan la licencia de obras. Las obras se hacen después. Cuando están las obras hechas el arquitecto emite el certificado final de obra, diciendo que la obra se ha hecho confirme al proyecto. Entonces ya tienes tu vivienda, el ayuntamiento te dará la licencia de primera ocupación o la cédula de habitabilidad, lo que corresponda. Es muy común en España hacer las obras sin arquitecto, y luego enterarse de que es imprescindible uno, buscar uno rápido y barato para que firme, y luego enterarse de que algunas obras que se hicieron no eran necesarias, otras se hicieron mal, y otras que se tenían que haber hecho no se hicieron. Pensando que te ahorras el arquitecto resulta que te sale más caro y peor. Recomiendo contratar un arquitecto independiente, que no tenga relación con la empresa que va a hacer las obras.
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Andrea respondió: Profesional de Certicalia
Sí, el arquitecto tiene que realizar un estudio de viabilidad, que implica empezar con el diseño de la distribución final de la vivienda (reuniones con el propietario para seleccionar la distribución final) y todo esto haciendo cumplir el Decreto de Habitabilidad del 2022, que es muy estricto y complejo de encajar, sobre todo en locales existentes.
A partir del diseño final, hay que preparar el informe con la justificación de toda la normativa que exija el ayuntamiento.
Son muchas horas de trabajo los que conlleva realizar este tipo de estudios de viabilidad, y por supuesto, tiene un coste.