Cómo se calcula la huella de carbono

Diego

Diego

Arquitecto

Publicado el 28/07/2016

La Huella de Carbono

La preocupación por el medio ambiente es algo evidente en la actualidad y por ello, aparecen nuevas normativas y nuevos términos técnicos en nuestro día a día de los cuales la mayoría de ellos no sabemos qué significan, entre los cuales encontramos la Huella de Carbono.

La Huella de Carbono es un indicador de sostenibilidad que mide la incidencia de una actividad, producto, evento u organismo sobre el cambio climático a lo largo de su ciclo de vida.

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A nivel práctico, es la suma de todas las emisiones GEI (Gases de Efecto Invernadero) liberadas directa o indirectamente a la atmosfera a lo largo del ciclo de vida del elemento que estamos considerando.

Las unidades que se utilizan para esta medición son toneladas de CO2 equivalente. Esta unidad representa la cantidad de CO2 que debería emitirse para producir un efecto sobre el cambio climático igual al que se produce con la emisión de los diferentes gases realmente emitidos en el proceso estudiado.

Según el protocolo de Kyoto, determina que los GEI son los siguientes 6 gases o familias de gases de efecto invernadero.

  • Dióxido de Carbono, CO2.
  • Metano, CH4
  • Óxido Nitroso, N2O
  • Perfluorocarbonos, PFC
  • Hidrofluorocarbonos,  HFC
  • Hexafluoruro de azufre, SF6

De manera resumida, la Huella de Carbono sería algo así como la marca que deja esa actividad en el medio ambiente.

Tipos de enfoque de la Huella de Carbono

Como hemos comentado anteriormente, el cálculo de la Huella de Carbono puede ir dirigido a una persona en concreto, a una organización o empresa, o a un producto determinado.

Por ello, debemos de diferenciar dos tipos de enfoque en la huella de carbono.

  • Huella de Carbono de una organización, en donde se mide la totalidad de GEI emitidos provenientes de dicha organización.
  • Huella de Carbono de un producto, en donde se mide los GEI emitidos a un determinado producto o servicio de la organización.

Dependiendo de los objetivos que se persigan, se seleccionará un enfoque u otro, existiendo metodologías de cálculo diferentes dependiendo del enfoque elegido.

Alcance de las emisiones

Una vez elegido el enfoque, debemos de diferenciar los GEI asociadas a las actividades según la procedencia de las emisiones, emisiones causadas directamente o indirectamente.

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  • Alcance 1. Emisiones GEI procedentes de fuentes de emisión propiedad de la Organización. Por ejemplo, el combustible utilizado para la climatización de los edificios propiedad de la organización o los utilizados en los procesos térmicos dentro de la empresa.
  • Alcance 2. Emisiones GEI procedentes de fuentes indirectas tipo 1. Principalmente las derivadas de la compra de energía. La electricidad es la fuente de emisión de este tipo más habitual.
  • Alcance3. Resto de emisiones GEI de fuentes indirectas. Son las derivadas del uso y utilización de materiales o servicios. Por ejemplo, material de papelería utilizado, tinta y tóner de impresoras, empresas de mensajería que utilizamos para enviar nuestros productos, etc.

El Alcance 3 es el más completo aunque puede producir duplicidad en la contabilidad de emisiones, puesto que las emisiones indirectas de una organización son siempre, emisiones directas de otra organización.

Como es evidente, los resultados del estudio serán muy diferentes si se realiza el cálculo con Alcance 1, Alcance 2 o Alcance 3.  La elección dependerá de los objetivos que se persigan y del grado de detalle que se le quiera dar al estudio. 

Tipos de implementación

Una vez decididos el enfoque del estudio y los alcances a calcular, hay que decidir el límite del sistema en cuanto a las emisiones que se van a tener en cuenta. Es decir, la implementación que se va a llevar a cabo.

  • Implementación Business to Business (B2B), donde se tiene en cuenta las emisiones producidas hasta la siguiente organización. Se considerarían las emisiones de los procesos que se realizan en la propia organización y aguas arriba de ésta.
  • Implementación Business to consumer (B2C), donde se tiene en cuenta las emisiones producidas hasta el final de ciclo (consumidor)

Certificado Huella de Carbono

Tanto a nivel internacional como nacional existen diferentes protocolos y directrices para el cálculo de la Huella de Carbono en función al alcance de la misma. Por ejemplo, la metodología del IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático) para las Comunicaciones Nacionales de Gases de Efecto invernadero, el PAS 2050 o el GHG Protocolo Estándar para productor para la huella de carbono de productos y la ISO 14064 o el GHG Protocolo estándar corporativo para el cálculo de la huella de carbono de una organización.

Huella de Carbono en España

Además a nivel nacional disponemos de un sistema oficial puesto en marcha por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) que valida los esfuerzos realizados por las empresas o los individuos al calcular la Huella de Carbono y reducir dichas emisiones, pudiendo inscribir dicho certificado en un Registro de Huella de Carbono.

La inscripción en dicho registro permite a las empresas el uso del sello MAGRAMA con el cual ponen en valor su implicación en la protección del medio ambiente.

Utilidad de la Huella de Carbono

El cálculo de dicho certificado es un primer paso a la mejora y abaratamiento del proceso de producción reduciendo los costes energéticos al conocer la foto fija en el momento del cálculo para, a partir de ahí, reducir las emisiones.

La Huella de Carbono lleva aparejado un aumento de oportunidades de venta de dicho producto en países o sectores que valoran los aspectos medioambientales e incluso mejorando la reputación del producto u organización.

Para aquellos que aún son reacios a dichas medidas comentar que en el sector agroalimentario de nuestro país son muchas las empresas o productos habituales de consumo que disponen de dicho certificado, tales como el aceite de oliva, vinos o incluso algunas hortalizas, además dichas medidas se empiezan a implantar en otros sectores.

La huella de carbono es el punto de inicio de actuaciones de reducción de consumo de energía y para la utilización de recursos y materiales con mejor comportamiento ambiental.

En Certicalia también queremos mantener el medio ambiente, y promover la eficiencia energética. Puedes leer alguno de nuestros post relacionados sobre como: instalar energías renovables en casa, el ahorro energético en comunidades de propietarios, o la arquitectura pasiva.

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